Pulgón Casero » Identificación y control de la plaga

María José González

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Los pulgones caseros, también conocidos como áfidos, son pequeños insectos que suelen infestar plantas de jardín y hogares, causando daños a las plantas.

PULGÓN CASERO » Identificación y control de la plaga

¿Cuáles son esos pequeños insectos verdes en sus plantas? ¡Probablemente sean pulgones! Estos son nuestros mejores consejos sobre cómo identificar y controlar los pulgones en el jardín.

Los pulgones parecen encontrar su camino en cada jardín. Son pequeños insectos de cuerpo blando que pueden sobrevivir en casi cualquier zona. Se multiplican rápidamente, por lo que es importante tenerlos bajo control antes de que comience la reproducción. Muchas generaciones pueden ocurrir en una temporada. La buena noticia es que tienden a moverse lentamente y el control de la plaga es relativamente fácil.

PULGÓN CASERO » Identificación y control de la plaga. Foto por Catkin Pixabay

Identificación del pulgón casero

Los pulgones son pequeños (los adultos miden menos de ¼ de pulgada) y, a menudo, son casi invisibles a simple vista. ¡Varias especies pueden aparecer blancas, negras, marrones, grises, amarillas, verdes claras o incluso rosadas! Algunos pueden tener un revestimiento ceroso o lanudo. Tienen cuerpos en forma de pera con largas antenas. Las ninfas se parecen a los adultos. La mayoría de las especies tienen dos tubos cortos que se proyectan desde su extremo posterior por donde extraen la sabia de las plantas (1).

Los adultos generalmente no tienen alas, pero la mayoría de las especies pueden desarrollar una forma alada cuando las poblaciones se agolpan, de modo que cuando la calidad de la comida sufre, los insectos pueden viajar a otras plantas, reproducirse y comenzar una nueva colonia. Los pulgones generalmente se alimentan en grupos grandes, aunque ocasionalmente se pueden ver solos o en pequeñas cantidades.

Mientras que los pulgones en general se alimentan de una amplia variedad de plantas, hay diferentes especies que pueden ser específicas de ciertas plantas. Por ejemplo, algunas especies incluyen pulgones de frijol, de col, de papa, de melocotón verde, de melón y pulgón de manzana lanudos (2).

Además de las características ya mencionadas, es importante destacar que los pulgones poseen una notable capacidad reproductiva, lo que facilita su rápida propagación en las plantas. Esta alta tasa de reproducción puede conducir a infestaciones masivas en poco tiempo, especialmente en condiciones de clima cálido y húmedo, que son ideales para su desarrollo. Los pulgones también pueden transmitir virus de plantas, lo que representa una amenaza adicional para la salud de las plantas afectadas (3).

Control de la plaga de pulgones

Las ninfas y los adultos se alimentan de jugos de plantas, atacando hojas, tallos, brotes, flores, frutas y / o raíces, según la especie. A la mayoría de los pulgones les gusta especialmente el crecimiento suculento o nuevo. Algunos, como el pulgón verde del durazno, se alimentan de una variedad de plantas, mientras que otros, como el pulgón de la manzana rosada, se enfocan en uno o solo unos pocos hospederos (4).

  • Intenta rociar agua fría sobre las hojas. A veces, todo lo que necesitan los pulgones es un fuerte baño para desalojarlos. Por lo general, no pueden encontrar el camino de regreso a la misma planta.
  • Si tienes una gran invasión de pulgones, espolvorea las plantas con harina. Hace que no se puedan pegar a las plantas.
  • El aceite de neem, los jabones insecticidas y los aceites hortícolas son efectivos contra los pulgones. Asegúrese de seguir las instrucciones de aplicación proporcionadas en el envase y usar la dosis que se le indique.
  • A menudo, usted puede deshacerse de los pulgones limpiando o rociando las hojas de la planta con una solución suave de agua y unas gotas de jabón para lavar platos. El agua jabonosa se debe volver a aplicar cada 2-3 días durante 2 semanas.
  • Una variación de esta mezcla de agua y jabón incluye la pimienta de cayena: mezcle 1 litro de agua, 1 cucharadita de jabón líquido para platos y una pizca de pimienta de cayena. No diluir antes de pulverizar sobre las plantas (5).
  • La tierra de diatomeas es un material orgánico no tóxico que matará a los pulgones. No aplique este polvo cuando las plantas están en flor. La desventaja es que también es perjudicial para los polinizadores.
  • Para árboles frutales o de sombra, rocíe aceite hortícola para matar los huevos de pulgones en el invierno y no se reproduzcan (6).

Otra estrategia efectiva para el control de pulgones es el uso de control biológico. Insectos beneficiosos como las mariquitas, crisopas y avispas parasitoides pueden ser aliados naturales en la lucha contra los pulgones, ya que se alimentan de estos o parasitan sus colonias. Estimular la presencia de estos insectos beneficiosos en los jardines puede ser una forma sostenible y ecológica de controlar las poblaciones de pulgones (7).

Además, la poda de las partes de las plantas que están infestadas gravemente puede ser una medida efectiva para reducir la población de pulgones. Esta técnica, aunque drástica, puede salvar el resto de la planta y evitar la propagación de la plaga a otras áreas del jardín o huerto (8).

Referencias:

  1. Cranshaw, W. (2021). Pulgones en las plantas del hogar y jardín. Extensión de la Universidad Estatal de Colorado.
  2. Blackman, R. L., & Eastop, V. F. (2006). Aphids on the World’s Herbaceous Plants and Shrubs. John Wiley & Sons.
  3. Foster, S. P., & Harris, M. O. (2020). Comportamiento y ecología de los pulgones. Annual Review of Entomology, 65, 347-366.
  4. Opfer, P., & McGrath, D. (2013). Pulgones del noroeste del Pacífico. Extensión de la Universidad Estatal de Oregon.
  5. Davidson, J. A., & Lyon, W. F. (1987). Insectos que afectan a las plantas de interior. Universidad Estatal de Ohio.
  6. Flint, M. L. (2018). Cómo gestionar plagas de jardines y paisajes. División de Agricultura y Recursos Naturales de la Universidad de California.
  7. Hodek, I., & Honěk, A. (2013). Ecología de las Coccinellidae. Springer Science & Business Media.
  8. Van Emden, H. F., & Harrington, R. (Eds.). (2017). Aphids as crop pests. CABI.
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