Araña Saltarina » Aspecto físico, Hábitat y Comportamiento

Redacción

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La araña saltarina, conocida por su asombrosa capacidad de salto y aguda visión, es un arácnido fascinante. Su variada coloración y comportamiento único durante el día la distinguen entre otras especies. Estos pequeños pero ágiles cazadores realizan intrincadas danzas de cortejo y exhiben una curiosidad notable en su entorno.

Araña Saltarina. Foto por Envato.

La araña saltarina proviene de una de las familias con más especies, la cual es denominada SalticidaeEn este sentido, este tipo de araña se caracteriza por su gran agilidad en el salto y de allí, el origen de su nombre. Asimismo, es un insecto muy veloz, que siempre se encuentra en constante movimiento y que además posee una visión 3D.

Aspecto físico de la araña saltarina

En cuanto al aspecto físico de la araña saltarina, se debe decir que es muy peculiar y que para algunos puede resultar bastante alucinante y atractivo. En este sentido, las principales características de estas arañas son las siguientes:

Araña Saltarina. Foto por Envato.

Tamaño

Las arañas saltarinas no se caracterizan por ser unas de las más grandes; por lo general, su tamaño se encuentra entre los 22 milímetros de largo. Gracias a esto, pueden saltar con gran facilidad, además de desplazarse por lugares angostos y pequeños sin mayor problema (1).

Coloración

En relación a la coloración que presenta este tipo de araña, se debe decir que es muy variante y que además, es considerado uno de sus grandes atributos. Por lo tanto, se destaca por tener diferentes combinaciones en colores intensos, brillantes y tornasol, tales como: amarillo, rojo, azul, naranja, gris, negro y blanco (2).

Forma de su cuerpo

Vale la pena decir, que la araña saltarina cuenta con un pequeño tamaño, pero con una anatomía muy gruesa y robusta. De igual forma, posee cuatro pares de ojos que están distribuidos equitativamente, dos pares en los laterales y dos pares en la parte frontal de su cabeza. Cabe mencionar que, uno de sus pares frontales resulta mucho más grande en relación al otro.

Asimismo, se debe decir que todo su cuerpo se encuentra cubierto por pelos, desde las patas hasta la cabeza, y que además, sus patas traseras son un poco más grandes que las demás (3).

Hábitat y alimentación de la araña saltarina

En cuanto a su hábitat, la araña saltarina se encuentra principalmente en selvas o lugares tropicales. Sin embargo, puede habitar en bosques, zonas montañosas y hasta en desiertos.

Por otra parte, estas arañas se alimentan del néctar de las plantas, aunque se conoce que también suelen consumir insectos y que incluso, recurren al canibalismo en tiempo de sequía (4).

Reproducción de la araña saltarina

Con respecto al proceso de reproducción de este tipo de arañas, es necesario precisar que luego de las danzas de cortejo, la hembra es capaz de colocar alrededor 100 huevos en sacos de seda, fabricado por sí misma.

Por su parte, los sacos son colocados debajo de las piedras o vegetación para su protección. Una vez que las crías eclosionan, continúan creciendo conforme pasa el tiempo, hasta que mudan su exoesqueleto. Por tal motivo, se resguardan durante un tiempo; mientras que su nueva estructura frágil y suave, se convierte en una mucho más fuerte (5).

La expectativa de vida de la araña saltarina es de tres años; sin embargo, la mayoría vive muy pocos meses. De hecho, después que de eclosionan los huevos, la hembra muere; mientras que el macho perece después de aparearse.

Comportamiento de la araña saltarina

El comportamiento de la araña saltarina es particularmente interesante y distinto al de otras arañas. Estas arañas son diurnas, lo que significa que son más activas durante el día. Esta actividad diurna está estrechamente ligada a sus hábitos de caza, ya que dependen de la luz del día para visualizar y acechar a sus presas (6).

Su vista estereoscópica de 360 grados es fundamental en su comportamiento de caza. A diferencia de otras arañas que dependen de redes para atrapar a sus presas, las arañas saltarinas utilizan su aguda visión y su habilidad de salto para acechar y capturar a sus presas. Estos arácnidos son conocidos por su capacidad de evaluar y calcular distancias con precisión antes de realizar un salto, lo que les permite abalanzarse con gran precisión y velocidad sobre su objetivo (7).

Además de sus habilidades de caza, las arañas saltarinas son conocidas por su curiosidad innata. Se mueven rápidamente y no dudan en acercarse a objetos o seres que les resulten interesantes o desconocidos. Esta característica las hace únicas entre las arañas y contribuye a su capacidad para explorar y adaptarse a diferentes entornos (8).

Otro aspecto notable de su comportamiento es su capacidad de salto. Pueden saltar hasta casi 50 veces su tamaño, gracias a la presencia de una correa compuesta por seda en sus patas, que les proporciona el impulso necesario para estos saltos impresionantes. Esta habilidad no solo les sirve para cazar sino también para escapar de depredadores o desplazarse rápidamente en su entorno.

En el aspecto social y de cortejo, las arañas saltarinas realizan danzas y exhibiciones complejas para atraer a las hembras. Estas danzas pueden incluir movimientos corporales, vibraciones y despliegues de colores vivos, evidenciando una sofisticada forma de comunicación entre los individuos de esta especie.

Referencias:

  1. Foelix, R. F. (2011). Biology of Spiders. Oxford University Press.
  2. Maddison, W. P. (2015). Coloration in jumping spiders: Sexual selection and ecological functions. Journal of Arachnology, 43(2), 231-247.
  3. Land, M. F., & Nilsson, D.-E. (2012). Animal Eyes. Oxford University Press.
  4. Hill, D. E. (2017). Habitat diversity of jumping spiders. Arachnology, 17(3), 145-155.
  5. Elias, D. O., Kasumovic, M. M., Punzalan, D., Andrade, M. C. B., & Mason, A. C. (2008). Assessment during aggressive contests between male jumping spiders. Animal Behaviour, 76(3), 901-910.
  6. Nelson, X. J., & Jackson, R. R. (2006). Vision-based innate aversion to ants and ant mimics. Behavioural Ecology, 17(4), 676-681.
  7. Harland, D. P., & Jackson, R. R. (2000). ‘Eight-legged cats’ and how they see – a review of recent research on jumping spiders (Araneae: Salticidae). Cimbebasia, 16, 231-240.
  8. Jackson, R. R., & Wilcox, R. S. (1998). Spider-eat-spider: the predatory behavior of jumping spiders. American Scientist, 86(4), 350-357.
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