Linfocitos B y linfocitos T, ¿Qué significan?

Redacción Médica

Los linfocitos T y linfocitos B son células clave del sistema inmunológico, responsables de defender al cuerpo contra infecciones y enfermedades. Los linfocitos T desempeñan un papel central en la respuesta inmunitaria celular, mientras que los linfocitos B producen anticuerpos para neutralizar patógenos. Ambos tipos de células trabajan en conjunto para mantener la salud y la protección del organismo.

Linfocitos B y linfocitos T, ¿Qué significan?

Nuestro sistema inmunológico está conformado por una gran variedad de células que se encargan de defendernos contra aquellas sustancias extrañas que amenazan con perjudicar nuestra salud, como es el caso de los gérmenes, las bacterias y los virus (1). Una vez que nuestro cuerpo detecta la presencia de alguna de ellas, distintos tipos de células salen en su defensa, mediante lo que conocemos como respuesta inmune, y entre ellas tenemos a los linfocitos T y los linfocitos B.

Comprendiendo los linfocitos T y los linfocitos B

Los linfocitos T y B son células de la sangre que se producen en la médula ósea y que se encargan de proteger a nuestro cuerpo de los agentes patógenos que pueden afectarle, por lo que se incluyen en el grupo de los llamados leucocitos o glóbulos blancos (2).

Linfocitos B y linfocitos T, ¿Qué significan?. Imagen de vecstock en Freepik

Los linfocitos T son los encargados de controlar la respuesta inmune celular, conformando el 70% del volumen total de linfocitos derivados de las proteínas o citosinas (3). También se encargan de colaborar en la generación de las respuestas inmunes, como es el caso de la fabricación de anticuerpos por los linfocitos B.

Por otra parte, los linfocitos B son los responsables de llevar a cabo la inmunidad mediante la fabricación de anticuerpos, una vez que se exponen a los antígenos o agentes patógenos que desencadenan la respuesta inmune (4). Este tipo de células constituyen entre el 5 y el 15% del volumen de linfocitos en la sangre.

¿Cómo se detectan los linfocitos T y linfocitos B en la sangre?

Para conocer la cantidad de células T y B en la sangre, es necesario practicarse un análisis sanguíneo en un laboratorio, cuyos resultados podrán variar ligeramente, dependiendo de las mediciones o muestras que se utilicen (5). En tal sentido, es importante discutir con el especialista médico los resultados específicos del recuento de linfocitos T y B obtenido.

Conociendo más a fondo a los linfocitos

Afortunadamente, nuestro cuerpo dispone de una gran cantidad de células, tejidos y órganos que se encargan de protegerlo contra la acción de sustancias extrañas como los gérmenes, las bacterias o las células tumorales, y uno de los principales organismos protectores inmunitarios son los linfocitos (1).

Linfocitos B

Este tipo de células se encarga de originar anticuerpos y proteínas para reconocer a los antígenos y adherirse a ellos, formando un anticuerpo determinado (6). Una vez que la célula B se encuentra con la sustancia extraña que la desencadena, ésta engendra distintas células plasmáticas que crean los anticuerpos. Así, cada antígeno tiene un anticuerpo establecido y siempre que se descubra su presencia, el anticuerpo se encargará de eliminarlo.

En líneas generales, las células B cumplen con las siguientes funciones:

  • Producir anticuerpos contra sustancias extrañas.
  • Actuar como células presentadoras de antígeno (APC)
  • Convertirse en células de memoria B luego de ser activadas por el contacto con un antígeno (6).

Los linfocitos B no son capaces de entrar en las células para eliminar al antígeno, por lo que el ataque a las células diana corre por cuenta de los linfocitos T (7).

Linfocitos T

Estos organismos celulares se encargan de reconocer, recordar y responder a la presencia de antígenos, colaborando en la respuesta inmune de dos formas distintas. Unos de ellos envían y gestionan tales respuestas. Cuando el antígeno les estimula, las células T fabrican linfocinas que se encargan de advertir a otras células (8). Por otra parte, algunos linfocitos pueden eliminar las células diana, penetrando directamente en ellas (3).

A modo general, los linfocitos T cumplen las siguientes funciones:

  • Evaluar el medio intracelular de los antígenos.
  • Atacar directamente a las células afectadas por los gérmenes (9).
  • Eliminar naturalmente las células cancerosas (10).
  • Activar y colaborar con otras células inmunitarias que sirven de anticuerpos.
  • Memorizar una bacteria durante largos periodos de tiempo (11).

Comprender la importancia de estos linfocitos en nuestro sistema inmunológico puede proporcionarnos una perspectiva más clara de cómo nuestro cuerpo lucha contra los agentes patógenos, manteniéndonos seguros y saludables.

Referencias:

  1. Alberts, B., Johnson, A., Lewis, J., Raff, M., Roberts, K., & Walter, P. (2006). Biología Molecular de la Célula. Barcelona: Omega.
  2. Janeway, C. A., Jr., Travers, P., Walport, M., & Shlomchik, M. J. (2005). Inmunobiología. Los Sistemas Inmunitarios en Salud y Enfermedad. Barcelona: Masson.
  3. Kuby, J. (1997). Inmunología. Madrid: Reverté.
  4. Golub, E. S. (1990). Inmunología. Un enfoque evolutivo. México: Limusa.
  5. Tortora, G. J., & Derrickson, B. H. (2017). Principios de Anatomía y Fisiología. México: Panamericana.
  6. Roitt, I., Brostoff, J., & Male, D. (1996). Inmunología. Madrid: Mosby.
  7. Janeway, C. A., Jr., & Medzhitov, R. (2002). Reconocimiento de la inmunidad innata. Revisión Anual de Inmunología, 20, 197-216.
  8. Beutler, B. (2004). Inferencias, preguntas y posibilidades en la señalización de los receptores similares a Toll. Naturaleza, 430(6996), 257-263.
  9. Seliger, B., Harders, C., Lohmann, S., Momburg, F., & Urlinger, S. (1998). Reducción de la maquinaria de procesamiento de antígenos de la clase I del MHC tras la transformación oncogénica de fibroblastos murinos. Revista Europea de Inmunología, 28(1), 122-133.
  10. Vivier, E., Raulet, D. H., Moretta, A., Caligiuri, M. A., Zitvogel, L., Lanier, L. L., … & Ugolini, S. (2011). ¿Inmunidad innata o adaptativa? El ejemplo de las células asesinas naturales. Ciencia, 331(6013), 44-49.
  11. Kaufmann, S. H. (2008). Fundamentos de la Inmunología: El centenario del Premio Nobel a Paul Ehrlich y Elie Metchnikoff. Inmunología de la Naturaleza, 9(7), 705-712.
¿Qué te ha parecido el contenido?

Your page rank:


Última actualización:

Autor
Índice
Artículos relacionados