Nuestro sistema inmune es una red compleja y altamente sofisticada compuesta por cientos de diferentes tipos de células. Estas células trabajan en conjunto para protegernos de las amenazas externas, como los gérmenes, las bacterias y los virus. Un componente clave en este sistema de defensa son los linfocitos, un tipo de glóbulos blancos. Pero, ¿qué son exactamente los linfocitos y qué papel desempeñan en nuestra salud? (1)
Función de los linfocitos en el sistema inmune
Los linfocitos son responsables de una gran parte de la respuesta inmunológica de nuestro cuerpo. Su trabajo es defender a nuestro organismo de los ataques de agentes infecciosos. Lo logran mediante el reconocimiento y la diferenciación entre las células propias del cuerpo y las sustancias extrañas. Una vez identificado un invasor, los linfocitos producen sustancias que atacan y destruyen el agente invasor. Este proceso es vital para mantenernos saludables y protegernos contra las enfermedades (2).
Valores Correctos de Linfocitos y Enfermedades Asociadas. Foto por Vector8DIY Pixabay
Valores Correctos de Linfocitos y Enfermedades Asociadas
Los especialistas médicos suelen medir el número de linfocitos en nuestra sangre como parte de un conteo completo de células sanguíneas. Un recuento saludable de linfocitos se encuentra generalmente entre 1.500 y 4.000 células por microlitro de sangre. Sin embargo, el rango normal puede variar ligeramente dependiendo del laboratorio que realice el análisis (3).
Los niveles de linfocitos por encima o por debajo de este rango pueden ser una señal de que algo no anda bien en nuestro organismo, y puede indicar la presencia de varias enfermedades o condiciones de salud (3).
Causas y enfermedades asociadas a los linfocitos altos
Un recuento elevado de linfocitos, también conocido como linfocitosis, puede ser el resultado de una serie de condiciones de salud. Estas incluyen enfermedades graves como la leucemia linfocítica aguda y crónica, el VIH, la mononucleosis, el mieloma múltiple, la tuberculosis, la vasculitis y la tos ferina (4).
Otras enfermedades que también pueden elevar los niveles de linfocitos incluyen la brucelosis, la enfermedad endocrina de Addison, la tirotoxicosis, y la hepatitis, entre otras. En algunos casos, los niveles altos de linfocitos también pueden ser el resultado de una reacción a ciertos medicamentos o a una respuesta inmunitaria después de una infección reciente (4).
Causas y enfermedades asociadas a los linfocitos bajos
Por otro lado, un recuento bajo de linfocitos, conocido como linfopenia, también puede indicar una serie de problemas de salud. Algunos virus y ciertos medicamentos, como los esteroides, pueden reducir el número de linfocitos. Además, trastornos autoinmunes como la artritis reumatoide, el cáncer, la enfermedad de Hodgkin, y algunas enfermedades que afectan el funcionamiento de la médula ósea, como la anemia aplásica, también pueden causar linfopenia (5).
Además, la linfopenia se asocia a menudo con trastornos neurológicos, como el síndrome de Guillain-Barre y la esclerosis múltiple, así como con diversas enfermedades infecciosas. Es esencial entender que un recuento bajo de linfocitos puede hacer a una persona más susceptible a infecciones y enfermedades (5).
Los linfocitos son una parte esencial de nuestro sistema inmunológico. Un recuento saludable de estos glóbulos blancos es crucial para mantener nuestro cuerpo protegido de las enfermedades y las infecciones (1).
Si tienes preocupaciones sobre tu recuento de linfocitos o sobre tu sistema inmunitario en general, siempre es una buena idea hablar con un profesional de la salud para entender mejor tu situación y explorar las opciones de tratamiento si es necesario (3).
Referencias:
- Abul, K., Andrew, H., & Shiv, P. (2012). Inmunología celular y molecular (8ª ed.). Elsevier España.
- Alberts, B., Johnson, A., Lewis, J., Raff, M., Roberts, K., & Walter, P. (2002). Biología molecular de la célula (4ª ed.). Editorial Médica Panamericana.
- Hoffbrand, A.V., Moss, P.A.H., & Pettit, J.E. (2016). Hematología esencial (7ª ed.). Wolters Kluwer Health.
- Bain, B.J. (2017). Células sanguíneas: Una guía práctica (5ª ed.). Wiley-Blackwell.
- Hoffman, R., Benz, E.J., Silberstein, L.E., Heslop, H., Weitz, J., Anastasi, J., Salama, M., & Abutalib, S.A. (2018). Hematología: diagnóstico y tratamiento (7ª ed.). McGraw-Hill Education.
