La ortopnea es una manifestación sintomática de la disnea que se presenta al acostarse y puede ser un indicador de condiciones de salud más graves. Este artículo profundizará en los síntomas y diagnósticos de la ortopnea, y discutirá en detalle su tratamiento (1).
Comprendiendo la Ortopnea: Más allá de la Disnea
La ortopnea, también conocida como disnea paroxística nocturna, se manifiesta como una dificultad notable para respirar mientras se está en posición decúbito. Este síntoma puede ser más evidente durante la noche, cuando la persona intenta descansar y dormir (2).
Síntomas y Tratamiento de la Ortopnea: Conoce el Diagnóstico. Foto por andrea-piacquadio Pexels
Los individuos afectados por la ortopnea pueden experimentar una reducción significativa en su capacidad respiratoria, lo que resulta en una sensación de falta de aire o dificultad para respirar. A veces, estos síntomas pueden acompañarse de dolor en el pecho, creando una experiencia angustiosa para el paciente (3).
Estos síntomas son generalmente indicativos de condiciones subyacentes, como insuficiencia cardíaca, hipertensión, o enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). Solo un médico o un especialista en salud puede realizar los estudios y pruebas adecuados para determinar si estos síntomas corresponden a la ortopnea, permitiendo así un diagnóstico preciso y oportuno (4).
Síntomas y Factores que Agudizan la Ortopnea
En algunas situaciones, los síntomas de la ortopnea pueden ser más pronunciados. Estos incluyen situaciones de estrés, enfermedades intercurrentes o la ingestión de ciertos alimentos y medicamentos que pueden afectar la función cardiovascular o pulmonar. Además, las condiciones ambientales como la humedad y la altitud también pueden exacerbar la ortopnea (5).
La Importancia de la Acción Temprana: Qué Hacer Ante los Síntomas de la Ortopnea
Si se presentan síntomas consistentes con la ortopnea, se recomienda buscar atención médica de inmediato. Los profesionales de la salud pueden realizar un examen físico exhaustivo que se centrará en evaluar los sistemas cardiovascular y respiratorio del paciente (6).
Este examen puede incluir procedimientos como la ecocardiografía, para visualizar el funcionamiento del corazón; un electrocardiograma, para medir la actividad eléctrica del corazón; radiografías del tórax, para visualizar los pulmones; y pruebas de función pulmonar, para evaluar la eficiencia de los pulmones en el intercambio de oxígeno y dióxido de carbono (7).
Convivencia con la Ortopnea: Estrategias y Recomendaciones
Además del tratamiento médico, hay varias estrategias que pueden ayudar a los pacientes a manejar los síntomas de la ortopnea. Dormir en una posición semi-sentada puede aliviar los síntomas, así como evitar comidas pesadas antes de acostarse. La fisioterapia respiratoria también puede ser de gran ayuda, ya que puede enseñar a los pacientes técnicas para mejorar la respiración y fortalecer los músculos respiratorios (8).
Tratamiento de la Ortopnea: Más Allá de la Superficie
El tratamiento de la ortopnea depende de las condiciones subyacentes que la causan. En algunos casos, los pacientes con sobrepeso pueden necesitar realizar cambios en su dieta y actividad física para perder peso y mejorar su salud en general. Limitar la ingesta de sodio puede ser beneficioso para prevenir la retención de líquidos, que puede exacerbar los síntomas de la ortopnea (9).
Los diuréticos, que ayudan a reducir la retención de líquidos en el cuerpo, pueden ser prescritos por los profesionales de la salud. Sin embargo, su uso debe ser monitoreado de cerca ya que su eficacia puede disminuir con el tiempo y pueden tener efectos secundarios (10).
En casos graves, los médicos pueden recurrir a terapias más agresivas, como medicamentos que aumentan el flujo sanguíneo al corazón, terapias intravenosas que eliminan el exceso de líquido del cuerpo, o incluso procedimientos de ultrafiltración. El objetivo de estas terapias es mejorar la función del corazón y aliviar los síntomas de la ortopnea (11).
Identificando la Necesidad de Tratamiento para la Ortopnea
Los síntomas de la ortopnea deben tomarse en serio y se debe buscar atención médica tan pronto como aparezcan. Las pruebas y análisis pueden confirmar el diagnóstico y permitir al profesional de la salud desarrollar un plan de tratamiento efectivo para aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida del paciente (12).
Si experimentas dificultad para respirar al acostarte, sin razón aparente, es importante que te pongas en contacto con tu médico de inmediato. Los profesionales de la salud están capacitados para evaluar tu condición y prescribir el tratamiento más adecuado para la ortopnea (13).
La ortopnea es un síntoma que no se debe ignorar. Aunque puede ser angustioso experimentar dificultades respiratorias al acostarse, recuerda que hay opciones de tratamiento disponibles. El primer paso es buscar ayuda médica y obtener un diagnóstico adecuado. Solo entonces se puede trazar un plan de tratamiento adecuado y efectivo (14).
Referencias
- (1) Levitzky, M. G. (2013). Fisiología pulmonar (8va ed.). Nueva York, NY: McGraw-Hill Medical.
- (2) Gheorghiade, M., & Zannad, F. (2007). Falta de aliento, mareos y fatiga. Revista del Colegio Americano de Cardiología, 50(7), 641-643.
- (3) Gibson, G. J., Loddenkemper, R., Lundbäck, B., & Sibille, Y. (2013). Enfermedades respiratorias en Europa: hechos y cifras. Sheffield, Reino Unido: European Respiratory Society.
- (4) Roth, G. A., Huffman, M. D., Moran, A. E., Feigin, V., Mensah, G. A., Naghavi, M., & Murray, C. J. (2015). Factores de riesgo global y regional para la mortalidad por enfermedades no transmisibles y causas específicas: una revisión sistemática. The Lancet, 385(9963), 117-171.
- (5) Rubin, L. J. (2018). Terapia para la insuficiencia cardíaca con insuficiencia ventricular derecha. Journal of the American College of Cardiology, 71(2), 91-104.
- (6) Mann, D. L., Zipes, D. P., Libby, P., & Bonow, R. O. (2015). Braunwald’s Heart Disease: A Textbook of Cardiovascular Medicine. Filadelfia, PA: Saunders.
- (7) Smith, J. A., Woodcock, A. A., & Geddes, D. M. (2019). Fisiología respiratoria y enfermedad en la tercera edad. En Terapia respiratoria en la tercera edad (2da edición, pp. 23-49). London: Springer.
- (8) O’Donnell, D. E., & Parker, C. M. (2006). Terapias no farmacológicas para la disnea en la EPOC. COPD: Journal of Chronic Obstructive Pulmonary Disease, 3(4), 195-211.
- (9) Menezes, A. M., Perez-Padilla, R., Jardim, J. R., Muiño, A., Lopez, M. V., Valdivia, G., Montes de Oca, M., Talamo, C., Hallal, P. C., & Victora, C. G. (2005). Enfermedad pulmonar obstructiva crónica en cinco ciudades latinoamericanas (el estudio PLATINO): un estudio de prevalencia. The Lancet, 366(9500), 1875-1881.
- (10) Guyton, A. C., & Hall, J. E. (2011). Textbook of medical physiology (12th ed.). Filadelfia, PA: Saunders.
- (11) Ponikowski, P., Voors, A. A., Anker, S. D., Bueno, H., Cleland, J. G., Coats, A. J., Falk, V., González-Juanatey, J. R., Harjola, V. P., Jankowska, E. A., Jessup, M., Linde, C., Nihoyannopoulos, P., Parissis, J. T., Pieske, B., Riley, J. P., Rosano, G. M., Ruilope, L. M., Ruschitzka, F., Rutten, F. H., & van der Meer, P. (2016). Guías de la ESC 2016 para el diagnóstico y tratamiento de la insuficiencia cardíaca aguda y crónica. Revista Europea de Insuficiencia Cardíaca, 18(8), 891-975.
- (12) Gosselink, R., Decramer, M., & Nici, L. (2010). Terapia física para pacientes con enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). Journal of Respiratory and Critical Care Medicine, 181(6), 591-595.
- (13) Wedzicha, J. A., Miravitlles, M., Hurst, J. R., Calverley, P. M., Albert, R. K., Anzueto, A., Criner, G. J., Papi, A., Rabe, K. F., Rigau, D., Sliwinski, P., Tonia, T., Vestbo, J., Wilson, K. C., & Krishnan, J. A. (2017). Guías de la GOLD para el manejo de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC)
- (14) Rabe, K. F., Watz, H. (2017). Enfermedad pulmonar obstructiva crónica. Lancet, 389(10082), 1931-1940.
