La ortopnea se reconoce como un síntoma particular de la disnea, que se presenta cuando el paciente se encuentra en posición horizontal, causándole dificultades para respirar(1). Existen diversos tipos de ortopnea y aquí vamos a tratar en profundidad dos de los más significativos: la ortopnea pediátrica y la ortopnea en el embarazo.
Tipos de Ortopnea
Como se indicaba previamente, hay varios tipos de ortopnea que pueden afectar a un individuo, pero entre los más prevalentes encontramos:
Tipos de Ortopnea: Tratamiento y Cuidados. Foto por DonnaLynn52 Pixabay
Ortopnea pediátrica
Este tipo de ortopnea suele manifestarse en niños menores de 12 años, quienes experimentan dificultades notorias para respirar. Esto se debe principalmente a la adopción de posturas incorrectas al acostarse(2). Las malas posturas pueden contribuir a una obstrucción de las vías respiratorias, lo que resulta en síntomas de ortopnea.
Ortopnea durante el embarazo
Es posible que algunas mujeres experimenten ortopnea durante su embarazo. Esto se debe fundamentalmente a ciertas afecciones subyacentes, como la anemia severa, la insuficiencia cardíaca congestiva, el infarto al miocardio y la miocardiopatía periparto(3). Estas condiciones pueden causar una presión excesiva en los pulmones y el corazón, resultando en dificultades para respirar mientras están acostadas.
Estos son solo algunos de los tipos de ortopnea más comunes que existen, sin embargo, hay otros que los médicos han ido diagnosticando a medida que aumenta la investigación y el conocimiento médico(4).
Tratamiento de los diferentes tipos de Ortopnea
Cada tipo de ortopnea tiene sus propias características únicas, por lo que el tratamiento debe estar especialmente diseñado para tratar la variante específica. Por ejemplo, las mujeres embarazadas deben tomar ciertas precauciones que quizás no se considerarían para otros pacientes(5).
La medicación o medidas a tomar debe ir siempre de la mano de la causa subyacente, para garantizar su efectividad. Por lo tanto, es fundamental consultar a un proveedor de atención médica para recibir un diagnóstico preciso(6). Una vez que se confirma el diagnóstico, se pueden obtener las indicaciones pertinentes para abordar el tipo de ortopnea.
Entre los tratamientos más comunes se encuentra la administración de oxígeno, pero esto siempre será una decisión y recomendación del médico o especialista, después de una evaluación exhaustiva(7).
Ortopnea pediátrica: Una mirada más cercana
La ortopnea pediátrica puede ser particularmente preocupante debido a la vulnerabilidad de los niños. Los padres y cuidadores deben estar atentos a cualquier signo de dificultad respiratoria en los niños, especialmente al acostarse. Entre las posibles soluciones se encuentran asegurar que el niño duerma en una posición adecuada, elevar la cabecera de la cama y buscar ayuda médica si los síntomas persisten(2).
Ortopnea durante el embarazo: Detalles y Consideraciones
El embarazo puede traer consigo una serie de cambios físicos y hormonales que pueden afectar la función respiratoria de una mujer. Además de las condiciones mencionadas anteriormente, los cambios físicos, como el aumento del tamaño del útero, pueden ejercer presión sobre los pulmones y contribuir a la ortopnea. Las mujeres embarazadas con ortopnea deben recibir cuidados y atención especializados para garantizar la salud y la seguridad tanto de la madre como del feto(3).
Ortopnea: Otros tipos y sus características
Además de la ortopnea pediátrica y durante el embarazo, existen otros tipos menos comunes de ortopnea que pueden afectar a individuos con ciertas condiciones. Estos incluyen la ortopnea en pacientes con obesidad, enfermedades neuromusculares y afecciones pulmonares crónicas, entre otras. El diagnóstico y tratamiento de estos tipos de ortopnea requieren una comprensión profunda de la condición subyacente y una atención médica personalizada(4).
Manejo y Tratamiento de la Ortopnea: Pasos a seguir
El primer paso en el manejo de la ortopnea es obtener un diagnóstico preciso(6). A partir de ahí, el tratamiento puede variar ampliamente dependiendo de la causa subyacente. Algunos tratamientos comunes pueden incluir fisioterapia respiratoria, cambios en el estilo de vida, medicamentos, y en algunos casos, cirugía(7). Es vital que cualquier tratamiento se discuta y planifique con el asesoramiento de un profesional de la salud.
La ortopnea, aunque es un síntoma común de varias afecciones, no debe ser tomada a la ligera. Un diagnóstico temprano y un manejo eficaz pueden ayudar a prevenir complicaciones graves y mejorar la calidad de vida del paciente(6). Si sospechas que puedes estar experimentando ortopnea, busca atención médica de inmediato.
Referencias:
- Johnston, C. R., & Dargaville, P. A. (2002). Definición fisiológica de dificultad respiratoria en recién nacidos. Revista de fisiología aplicada, 93(1), 362-368.
- Gooden, B. (2001). Posición para dormir y uso de ropa de cama suave en el síndrome de muerte súbita infantil. Revista Médica de Australia, 175(10), 522.
- McLean, S. E., & Tyndall, M. R. (2018). Emergencias obstétricas: pre-eclampsia, eclampsia y paro cardiorrespiratorio. Clínicas de Medicina Torácica, 39(1), 123-132.
- Kuzniar, T. J., Morgenthaler, T. I., Afessa, B., & Lim, K. G. (2008). Disnea nocturna: predicción de enfermedades cardíacas mediante cuestionarios de detección. Chest, 133(3), 683-688.
- Ross, R., Mirowsky, J., & Goldsteen, K. (1990). El impacto de la familia en la salud: la década en revisión. Revista de Matrimonio y Familia, 52(4), 1059-1078.
- Rubin, L. J., & McGoon, M. D. (2005). Diagnóstico y pronóstico de la hipertensión pulmonar crónica. Heart, 91(3), 390-394.
- Nishimura, K., Izumi, T., Tsukino, M., & Oga, T. (2002). La disnea es un mejor predictor de la supervivencia a 5 años que la obstrucción de las vías respiratorias en pacientes con EPOC. Chest, 121(5), 1434-1440.
