El líquido que circula por todo el sistema linfático recibe el nombre de “Linfa”.
Tiene su origen, o mejor dicho, se puede formar, justo cuando el líquido intersticial (este es el líquido que está en los intersticios de todo el tejido del cuerpo) se recolecta mediante los capilares linfáticos.
LINFA » Qué es, Funciones y Características Foto por pawel-czerwinski Unsplash
Posteriormente se transporta a través de vasos linfáticos más grandes hasta los ganglios linfáticos. Una vez que el líquido linfa está allí es limpiado por los linfocitos. A partir de allí, se vacía en la vena subclavia derecha o izquierda, en donde se termina mezclando con la sangre.
Si quieres conocer un poco más sobre la Linfa, aquí te enseñaremos paso a paso todo lo que es, su origen y características principales. Veamos entonces un poco más sobre la Linfa.
¿De dónde deriva la linfa?
Esta deriva del líquido intersticial. Su composición va cambiando de forma continúa mientras que la sangre y las células circundantes intercambian constantemente sustancias con el líquido instersticial.
Generalmente se parece mucho al plasma sanguíneo, el cual es el componente fluido de la sangre.
La linfa como función devuelve proteínas y exceso de líquido intersticial al torrente sanguíneo.
Este líquido puede recoger bacterias para posteriormente llevarlas a los ganglios linfáticos en los cuales terminan destruyéndose por los mismos gánglios.
Las células cancerosas metastásicas se pueden transportar también mediante la linfa. De igual forma se transportan por allí las grases del sistema digestivo a la sangre.
Estructura de la Linfa
La linfa suele tener una composición comparable a del plasma en la sangre. La diferencia se basa en que la linfa tiene glóbulos blancos.
Ahora bien, en lo particular, la linfa que sale de un ganglio linfático suele ser más rica en los linfocitos.
De igual manera, la linfa que está formada en el sistema digestivo humano llamada quilo es muy rica en triglicéridos y luce un color blanco lechoso por el contenido de sus lípidos.
Desarrollo de la linfa
Ahora veremos un poco cómo se desarrolla la linfa en el cuerpo humano.
Pues bien, la sangre suministra diferentes nutrientes y metabolitos importantes a las células de un tejido. A partir de ello, esta recupera los productos de desecho que producen, lo cual requiere el intercambio de los constituyentes respectivos entre lo que es la sangre y las células de los tejidos.
No obstante, dicho intercambio no es directo, sino que se va produciendo mediante un intermediario que se llama “fluido intersticial“, el cual ocupa los espacios entre las células .
Mientras la sangre y células circundantes agregan y eliminan continuamente sustancias del fluido intersticial, la composición cambia de manera continua.
El agua y los solutos pueden pasar entre el líquido intersticial y la sangre a través de la difusión mediante las brechas en las paredes capilares que se llaman hendiduras intercelulares. Por ello, la sangre y el fluido intersticial se encuentran en equilibrio dinámico entre sí
Fluido intersticial
El fluido intersticial es formado en el extremo arterial de los capilares dada la mayor presión de la sangre en comparación con las venas, y la mayor parte regresa a sus extremos venosos y vénulas. El resto regresa a los capilares linfáticos como linfa.
Por tanto, cuando la linfa se forma es un líquido transparente acuoso con la misma composición que el fluido intersticial.
No obstante, mientras que fluye a través de los ganglios linfáticos, este entra en contacto con la sangre y tiende a acumular más células.
Función de la linfa
La linfa principalmente devuelve proteínas y exceso de líquido intersiticial hasta el torrente sanguíneo.
El líquido “Linfa” puede también recoger bacterias y trasladarlas hasta los ganglios linfáticos donde son destruidos.
Por su parte, las células cancerosas metastásicas también pueden transportarse mediante la linfa. La linfa también transporta las grasas del sistema digestivo a la sangre vía “quilomicrones”.
Circulación linfática
En el caso de los vasos tubulares, estos transportan la linfa a la sangre, reemplazando así el volumen perdido durante la formación del líquido intersticial. A estos canales se les llama “canales linfáticos“.
Para diferenciarlo del sistema cardiovascular, el sistema linfático no está cerrado y tampoco tiene una bomba central o corazones linfáticos.
El transporte de linfa, por tanto, es bastante lento y esporádico.
Pese a la baja presión, lo que es el movimiento linfático se da debido a la peristalsis, las válvulas y la comprensión durante la contracción del músculo esquelético adyacente y la pulsación arterial.
La linfa, por su parte, ingresa a los vasos linfáticos desde los espacios intersticiales, pero no fluye hacia atrás a lo largo de los vasos debido a la presencia de las válvulas. No obstante, en caso de que se desarrolle una presión hidrostática excesiva dentro de los vasos linfáticos, parte del líquido puede filtrarse hacia los espacios intersticiales y contribuir a la formación de un edema.
En cuanto al flujo de la linfa en el conducto torácico en una persona en reposo promedio generalmente se aproxima a 100 ml por hora. Esto puede elevarse en varios pliegues mientras hace ejercicio. Por tanto, se puede estimar que, sin flujo linfático, una persona promedio podría morir en apenas 24 horas.
Importancia de la Linfa
La linfa, así como los demás organismos pertenecientes al sistema inmunológico, cumple una función importante de cara a la limpieza de los tejidos y eliminación de bacterias.
Sin la linfa, no se podrían transportar diferentes bacterias para ser eliminadas en los ganglios linfáticos.
Recordemos que el sistema linfático está compuesto de diferentes células y organismos, y es precisamente este sistema el que contribuye direcamente a mantener saludable nuestro organismo.
Recomendaciones finales
Para mantener una buena salud del sistema linfático es recomendable mantener buenos hábitos en nuestra vida. A partir de allí, ingerir alimentos saludables, llevar una dieta balanceada y evaluar exámenes médicos a menudo son prácticas importantes de cara al buen funcionamiento de nuestro organismo.
Por último, si llegas a tener algún problema de salud relacionado directamente a la Linfa, es recomendable que vayas a un médico especialista en ello.
Una vez que un médico tratante determine el problema, establecerá un tratamiento adecuado para ello.
